El dengue es una enfermedad viral transmitida por el mosquito Aedes aegypti, de hábito domiciliario y diurno. Existen 4 serotipos, el circulante en éste momento predominantemente es el serotipo 2.
Si se contrae dengue por algún serotipo se queda inmune contra el mismo, pero hay mayor riesgo de padecer dengue hemorrágico si se contrae algún otro serotipo. Se puede contagiarse de dengue hasta 4 veces en la vida dado por los diferentes serotipos.

El mosquito hembra pica una persona con dengue y a la semana empieza a transmitir la enfermedad. Los Aedes ponen huevos en lugares donde se estanca agua. La vida media del mosquito es de aproximadamente 30 días.
Hay diferentes formas de presentación clínica. Por cada paciente sintomático, hay 7 sin síntomas que padecen la enfermedad. Las formas más graves de la enfermedad se caracterizan por hemorragias y disfunción de órganos internos.

El periodo de incubación es de 5 a 7 días. Los síntomas más frecuentes son fiebre, cefalea, dolor abdominal, dolor retrocular y erupción en piel. Está ausente la tos y el moco de la vía aérea superior.

Las etapas de la enfermedad se pueden dividir en febril, crítica que aparece entre los días 4 y 7, y de recuperación. La enfermedad puede durar de 7 a 14 días.
El diagnóstico se realiza hasta el día 5 se puede realizar con PCR para virus dengue o presencia de antígeno NS1, luego del quinto día empieza a aparecer la inmunoglobulina M.

En los análisis sanguíneos son característicos el recuento bajo de glóbulos blancos y plaquetas, que favorecen las hemorragias.
El tratamiento es de sostén, se basa en la correcta hidratación del paciente, paracetamol para fiebre o dolor. Hay que evitar la aspirina por el riesgo de hemorragia. No existen antivirales efectivos hasta el momento.

Es importante la detección de los síntomas de alarma que son dolor abdominal intenso y sostenido, vómitos persistentes, derrame de las serosas (en peritoneo, pleura o pericardio), sangrado de mucosas y cambio en el estado mental del paciente: somnolencia o irritabilidad.
La mortalidad es muy baja menor al 1% de los infectados, generalmente en personas con comorbilidades.

Hay vacunas que se están ensayando en el mundo que previene las formas graves.
La prevención se realiza con el uso de ropa que cubra las superficies expuestas al sol, poniéndose repelente para evitar las picaduras, fumigación, tapar, colocar bajo techo, rellenar con arena o voltear: floreros, tachos, latas, botellas, neumáticos en desuso. Si hay un caso dengue se buscará los enfermos febriles 8 manzanas alrededor de su domicilio y fumigación.

Dr Marcelo Cutro MP 8582

(CONCORDIA24)