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Un pescador de Arroyo Seco capturó un ejemplar de Salmón Chinook de las aguas del Río Paraná. Es un pez originario de ámbitos marinos fríos del hemisferio norte. Investigan los factores por los cuales apareció en la zona. Fotos.
Especialistas del Acuario del Río Paraná investigan la aparición de un ejemplar de la familia de los salmones capturado a la altura de Arroyo Seco. El hallazgo fue reportado por un pescador artesanal que atrapó al animal de escamas plateadas y unos cinco kilos de peso, una verdadera rareza para la fauna ictícola de la zona. Ahora, en los laboratorios del acuario del parque Alem intentarán determinar su origen. La principal hipótesis es que podría provenir de los emprendimientos de cultivo, en el sur de Chile. 

Los salmones son peces marinos del Hemisferio Norte que llegan a ríos y lagunas para reproducirse y desovar. Es una especie que acostumbra nadar grandes distancias contracorriente. Hace algunas décadas se han introducido en la Patagonia, sin embargo, su presencia no es frecuente en aguas cálidas. Por eso, la aparición de un salmón chinook en una excursión de pesca que partió desde Arroyo Seco no pasó inadvertida.

Investigación

Enterados del hallazgo, el equipo técnico del Acuario se acercó al lugar del reporte para corroborar y determinar taxonómicamente la aparición de esta especie exótica. Además se tomaron muestras del ejemplar para ser derivadas al Laboratorio de Biotecnología Acuática del centro (Conicet-UNR).
Con ese material, los investigadores podrán determinar genéticamente la especie del animal y establecer si tiene algún parentesco con ejemplares hallados en el río Santa Cruz, en el sur del país, en 1998. Según estiman, el pez capturado en Arroyo Seco podría corresponder a la especie Oncorhynchus tshawytscha, perteneciente a la familia de los salmónidos, originaria del Hemisferio Norte.

Desde los inicios del siglo XX, estos peces ampliaron su distribución hacia los mares del sur a partir de la intervención humana. En la década del 80 se los sembró en ríos de la Patagonia chilena con el objetivo de impulsar la pesca deportiva. En 1998 se los encontró por primera vez en territorio argentino. Si la teoría se confirma, y los peces hallados en el Paraná están relacionados con estos ejemplares, habrían tenido que remontar más de 2 mil kilómetros para colonizar otros ambientes.

No es la primera vez que en el Paraná se pesca un ejemplar de salmón chinook. Hace cuatro años, a fines de octubre de 2018, fue capturado otro pez de esta especie en la localidad de San Pedro (Buenos Aires). En esa oportunidad, el especialista Jorge Liotta, del Museo de Ciencias Naturales de San Nicolás, tuvo a su cargo la investigación del hallazgo.

Nadar contracorriente

Al acuario del parque Alem suelen llegar consultas de pescadores profesionales o aficionados que se encuentran con algún pez extraño. «En general son consultas sobre especies normales, que viven en el río pero no resultan conocidas», señala Damián Lescano, biotecnólogo y miembro del equipo de acuaristas del centro de divulgación e investigación.

Hace poco más de una semana, en cambio, quien pidió la intervención de los especialistas fue Fabio Baena, un pescador deportivo, divulgador de la extensa fauna ictícola del Paraná y muy conocido entre los pescadores de la zona. El hombre les comentó sobre la aparición del ejemplar de salmón chinook en Arroyo Seco.

Como el laboratorio del acuario tiene equipos e instrumental para estudiar la genética de los peces, decidieron tomar una muestra para dejar registro del hallazgo. Así, el pez plateado, de unos cinco kilos, llegó congelado a los laboratorios del acuario. Allí descubrieron que era una hembra adulta y que estaba lista para desovar, además tomaron muestras para hacer los análisis genéticos.

«El laboratorio del acuario participa de proyectos para crear bases de datos de material genético de los peces del Paraná y, al ser una aparición nueva, de una especie introducida, pensamos que podemos contribuir para saber sobre su procedencia. Este tipo de salmones tiene su hábitat natural en el Pacífico del Hemisferio Norte y usan los ríos para desovar. Lo que queremos hacer es relacionar sus datos genéticos con los salmones de la Patagonia, para tener más certeza sobre de dónde vienen», explicó Lescano.

¿Una especie invasora?

Las especies exóticas son una problemática ambiental a nivel internacional que puede llevar a la aparición de plagas o a la extinción de especies autóctonas. Estas especies amplían su distribución por medios antrópicos como la liberación intencional o accidental y encuentran un hábitat favorable donde establecerse gracias a buenas condiciones climáticas y reproductivas, y a la ausencia de depredadores, lo que hace que aumente con gran rapidez el número de individuos desplazando especies autóctonas, con las que compite por lugares de reproducción y alimentación.

Para Lescano, a priori, el Paraná no parecería ser un ambiente ideal para los salmones, pero llama la atención que se hayan encontrado en dos oportunidades. «El salmón chinook es de aguas frías y justo aparecen en esta época, que en primavera el Paraná tiene 25 grados, al menos no sería un ambiente típico. Por eso pensamos que no sería una especie capaz de invadir el río. Pero hay que verlo», sostuvo a LaCapital.

La subsecretaría de Proyectos de Innovación Productiva, Eliana Eberle, destacó la importancia de la participación del acuario como parte del trabajo de conservación de las especies autóctonas. “Desde el Acuario del Río Paraná consideramos que la intervención técnica en registros de esta índole colabora en hechos puntuales a la hora detectar factores de conservación de las especies del río Paraná”, señaló.

Recomendaciones
Desde el centro de investigación brindaron recomendaciones a los pescadores en el caso de capturar este tipo de salmones en la cuenca del Paraná.
En primer lugar, destacaron que al tratarse de una especie exótica invasora no hay que devolverla al agua. Lo que sí es necesario hacer es registrar la información sobre el lugar de captura, fecha, peso y longitud total y reportarla al Acuario del Río Paraná (acuarismo.acuario@santafe.gov.ar).

Además, se pide conservar al ejemplar entero en cadena de frío hasta coordinar la extracción de una muestra con el equipo técnico acuariológico del centro, que se encuentra abocado a estudiar este fenómeno.

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