Estamos viviendo una situación crítica que afecta directamente la calidad de la educación de sus hijos. Sabemos que ustedes desean lo mejor para ellos, y nosotros, como docentes, compartimos esa misma preocupación y compromiso.

Queremos que comprendan que nuestra lucha no es solo por un salario digno, sino también por una educación de calidad para sus hijos. Hoy en día, la escuela pública se sostiene en gran parte gracias al esfuerzo de los docentes. Somos nosotros quienes organizamos rifas, peñas, ventas, y ponemos dinero de nuestro propio bolsillo no solo para llevar adelante nuestras clases, sino también para mantener la infraestructura de las escuelas. Todo sale de los docentes.

Esto no es una falta de vocación. Amamos nuestra profesión y nos dedicamos con pasión a la enseñanza. Sin embargo, sentimos que todo el esfuerzo y la dedicación que ponemos no son valorados. Los sueldos docentes han quedado muy por debajo de los de cualquier otro empleado estatal, incluso por debajo de un empleado municipal.

Si los docentes dejaran de poner dinero de su bolsillo para que sus hijos aprendan, ¿quién lo haría? El Estado no está cubriendo estos costos, y sin recursos adecuados, la calidad de la educación se ve comprometida.

Nosotros estamos dispuestos a compartir nuestros recibos de sueldo si es necesario, para que puedan verificar que lo que decimos es cierto. Además, queremos que sepan que el trabajo docente no se limita a las horas en el aula; realizamos informes, notas, evaluaciones, planificamos nuestras clases, imprimimos, recortamos, y realizamos muchas otras tareas que requieren horas extras. Ningún otro empleado estatal tiene las mismas obligaciones extras, por lo que creemos justo nuestro reclamo.

Por eso, les pedimos su comprensión y apoyo. Nos duele ser cuestionados cuando realizamos un paro; necesitamos su respaldo, y que se involucren mostrando su apoyo en las distintas medidas que podamos tomar, ya sea participando en marchas o ayudando a divulgar este mensaje.

Si nos unimos y logramos el simple objetivo de un sueldo digno- sin contar tantas otras cosas que están mal en el sistema y que nos perjudican- los chicos y nosotros estaríamos en el aula como corresponde. La educación de los niños es RESPONSABILIDAD DE TODOS.

Gracias por su apoyo y comprensión en este momento difícil e importante.

Docentes de la Provincia de Entre Ríos